Richard Mille presenta el modelo RM 88 automatic tourbillon smiley, un maravilloso reloj que combina arte y tecnología. Un capricho para tan solo 50 afortunados que tengan la opción de optar a el y el millón doscientos mil euros necesarios para adquirirlo. Si estás pensado que puedes ser uno de esos afortunados, por lo que hemos podido saber, ya están todos vendidos.
Un círculo amarillo, dos ojos ovalados y una boca ancha y respingona. De esta manera tan sencilla, Franklin Loufrani creó un nuevo lenguaje de comunicación, que en poco más de 50 años, se ha convertido en el lenguaje más utilizado del planeta.
La famosa sonrisa, como deseo de conectar con los demás, apareció el 01/01/1972 en las páginas del periódico francés France Soir con el lema “tómese tiempo para sonreír” y rápidamente se convirtió en viral, ya que transmitía mucha energía positiva.
Portada del periódico France Soir el 1 de enero de 1972
Pero la sonrisa como medio de comunicación ha estado presente desde la antigüedad, tan es así que la encontramos en máscaras de piedra de ritos funerarios del Neolítico de hace 9.000 años, en la estatua del gobernador de Mesopotamia del 2.400 a.c. (Museo del Lorvre), en las esculturas de los faraones egipcios o de Buda, sin olvidar la sonrisa más famosa del mundo creada por Leonardo da Vinci en su cuadro La Gioconda.
En la década de 1990, Nicolas Loufrani, hijo del creador y director de The Smiley Company empezó a diseñar iconos para sustituir a los mensajes de texto tipo 🙂 😉 🙁 de esa época, naciendo así los emoticonos.
Tal es la importancia actual de los emoticonos, que Richard Mille ha lanzado un reloj en el cual se enfatizan todos estos valores.
Pero antes de seguir, como no podremos ver este reloj en persona, creo que lo mejor es que lo veamos con todo lujo de detalle en un vídeo que ha preparado Richard Mille, el cual nos permite ver detalles del reloj dificilmente explicables con palabras.
Alrededor de la cara de Smiley, una serie de esculturas en miniatura toman posesión del movimiento del RM 88 Automatic Tourbillon Smiley, formando una escena surrealista, llena de diversión y demostrando el verdadero dominio de lo pequeño, ya que no te puedes hacer una idea de lo complicado que es técnicamente esta creación desarrollada por Richard Mille.
El Richard Mille RM 88 Tourbillon Automático Smiley es un reloj complejo, altamente técnico y creativo, cuyo desarrollo ha llevado tres años. Las dimensiones y el peso de las micro esculturas de oro realizados por el grabador Olivier Kuhn requerían un cuidado especial, ya que las piezas ensambladas, que pesan menos de un gramo cada una, deben resistir todo tipo de golpes.
Complicado igualmente fue colocar los objetos en el espacio tridimensional que rodea el Smiley, el motivo central, no sólo para maximizar su efecto, sino también para facilitar su inserción por parte del relojero.
La solución fue dotar al RM 88 de dos placas: una técnica, para soportar el movimiento, y otra auxiliar, para fijar la ornamentación en el lado izquierdo de la esfera. Montada posteriormente en el movimiento, esta segunda placa sirve para presentar los objetos en un plano inclinado y conseguir un mayor efecto volumétrico.
El segundo reto al que se enfrentó Richard Mille fue la concepción de un movimiento que dejara suficiente espacio libre para lucir a los múltiples protagonistas de esta escena con un impacto óptimo.
El nuevo calibre CRMT7, un movimiento TOURBILLON automático, es de diseño propio de la empresa. Para garantizar la rigidez y la planitud, sus puentes y su platina microgranallada son de titanio de grado 5.
El puente del TOURBILLON, cuenta con un complejo revestimiento doble de PVD en negro y oro, un acabado que se reproduce en el puente situado en el reverso de la platina, acentuando su forma de rayo.
Cada minuto, el segundero figurativo alterna entre la lluvia y el buen tiempo, deslizándose sobre la nube ARCAP fijada al TOURBILLON y ocultándose bajo una pequeña nube de oro blanco microgranulado y satinado de la que emerge al pie de un alegre arco iris diseñado en cuatro tipos de oro diferentes, cuya alternancia entre acabados microgranulados y estirados requiere 25 horas de mano de obra.
Si algo ha caracterizado desde el inicio a la casa Richard Mille, ha sido no escatimar esfuerzos en los acabados, lo que ha provocado el respeto de los clientes y el encarecimiento de sus productos.
Prueba de ello es la composición de este modelo, donde la copa de cóctel es un conjunto de cuatro piezas, todas en oro. El paraguas, la aceituna (de 1,7 mm de altura), la pajita acanalada de 0,4 mm de diámetro y la propia copa, cuya base está microchapada para transmitir su frescor, pesan en total sólo 0,4 g.
La flor de oro situada sobre ella está pulida a espejo, sus pétalos cepillados y chapado en rodio. El flamenco rosa, de 0,2 g de oro rojo, también se somete a múltiples procesos: sus alas se pulen y sus plumas se trazan con la punta de una piedra de afilar Dégussit; su ojo se realiza con la herramienta de rebordear más pequeña que existe; su pedestal se somete a un microchapado y la parte que representa la hierba y el agua se pule. El componente recibe un revestimiento de PVD de color rosa metálico antes de pintar el pico de color negro con un pincel, siendo todas estas operaciones realizadas a mano.
La caja es de cerámica blanca ATZ – conocida por su resistencia al rayado, los golpes y la abrasión, así como por su eterna blancura – mientras que para la correa se ha empleado oro rojo. La corona lleva el precioso Smiley esculpido en oro amarillo.
El Richard Mille RM 88 Automatic Tourbillon Smiley, resulta una creación lúdicamente colorida, poética y viva, aunque limitada a tan solo 50 relojes. Una obra maestra encantadora cuyas vibraciones positivas destilan un lenguaje universal, el de la sonrisa, para los pocos afortunados que puedan acceder primero y luego pagar 1.2 millones de euros por esta obra de arte.
CAJA DE CERÁMICA BLANCA ATZ Y ORO ROJO
Richard Mille es una de las casas relojeras que más apuesta por la incorporación de nuevos materiales en sus productos, fruto de un I+D loable. Más allá de diseños únicos y con personalidad, sus productos presentan formas armoniosas y avances técnicos como la supresión del anillo de encajado fijando el movimiento al chasis mediante un silentblocks de tornillos de titanio.
El bisel y el fondo de la caja son de cerámica blanca ATZ, la cual se fabrica con tubos de polvo de óxido de aluminio inyectados a una presión de casi 2.000 bares. Esta inyección a alta presión aumenta la rigidez entre un 20% a 30% y reduce la porosidad del material a un mínimo absoluto.
El ATZ es conocido por su gran resistencia al rayado (1.400 Vickers) y su color inalterable. Después del diamante, es uno de los materiales más duros del mundo. Se requiere un largo y difícil mecanizado con herramientas de diamante para crear los biseles curvados de acabado satinado.
La caja tripartita, de oro rojo 5N de 18 quilates, es estanca hasta 50 metros. El cristal es de zafiro y algunas partes de titanio son tratadas en PVD negro.
Todos los acabados del reloj se realizan a mano, pasando estrictos controles de calidad en todos y cada uno de los procesos.
El movimiento CRMT7, un mecanismo diseñado por Richard Mille, es un movimiento tourbillon de carga automática, con una reserva de marcha de 50 h, el cual posee la platina y los puentes en titanio grado 5 ( 90% titanio, 6% aluminio y 4% vanadio) con tratamiento de pvd negro lo que le confiere rigidez y resistencia a la corrosión.
El volante de equilibrado de inercia es variable, lo último en innovación. Esto garantiza una mayor fiabilidad ante los golpes y durante el montaje o desmontaje del movimiento, lo que se traduce en mejores resultados cronométricos a largo plazo.
Se suprime la raqueta y se consigue un calibrado más preciso, gracias a cuatro pequeñas pesas ajustables situadas directamente en el volante.
El barrilete de rotación es rápido (5 horas por revolución en lugar de las 7.5 horas actuales). Este tipo de barrilete presenta las siguientes ventajas:
- Reduce significativamente el fenómeno de adherencia interna periódica del muelle real, aumentado así el rendimiento.
- Proporciona una excelente delta de la curva del muelle real con una relación ideal de reserva de marcha/rendimiento y regularidad.
CARACTERÍSTICAS TÉCNICAS DEL RM 88 AUTOMATIC TOURBILLON SMILEY
CAJA
- Oro rojo de 18 kt,
- Bisel y fondo en cerámica blanca ATZ de óxido de aluminio.
- Dimensiones: Tonel de 48.15 mm de largo, 39.74 mm de ancho y 13.30 mm de alto.
- Cristal de zafiro.
- Materiales de titanio tratado en PVD negro.
MOVIMIENTO
- Calibre CRMT7
- Movimiento mecánico de carga automático.
- Funciones Tourbillon, horas y minutos.
- Reserva de marcha 50 horas.
- Volante de inercia variable.
- Platina y puentes en titanio.
- Rotor de oro.
- Barrilete de rotación rápida.
PRECIO DEL RM 88 AUTOMATIC TOURBILLON SMILEY: 1.2 MILLONES DE EUROS
Edición limitada a 50 unidades.
Y para finalizar nada mejor que ver a un relojero de Richard Mille montando el RM 88 con un lujo de detalle pocas veces visto en video.
Jorge
Richard Mille hace grandes relojes por complicaciones y por arte. Este smiley me ha encantado y reconozco la dificultad técnica que tiene. El precio mejor ni lo comentamos, está por completo fuera de mi alcance, como el Ferrari La Ferrari, aunque disfruto contemplandolo.
Antonio
Richard Mille no deja de sorprendernos.
Igor Librero
Antonio, este reloj en concreto es complejo técnicamente de hacer que funcione.
Rubén López
Richard mille juega en otra liga, lo malo es que es imposible comprarlos a esos precios.